Pensaba que con el comentario anterior tendría redondeado el año en lo que respecta a críticas, pero este disco me tiene dándole vueltas desde hace meses y no había conseguido 'entrarle' debidamente, en primer lugar porque -simple y raspado- no es tan fácil y en segundo... porque no es tan fácil (¿ya lo dije?). Esos son los discos buenos, los superiores, esos que se hacen de rogar, a los que se les percibe calidad pero exigen trabajarlos, entenderlos, asimilarlos. Hablemos pues de "Ayam" de los alemanes Disillusion.
En clave Prog, pero también con fuertes elementos Alternative, esta gente presenta su cuarto disco en dieciocho años, pero con una particularidad, los dos primeros de inicios de los dos mil y los dos segundos en la segunda década, entre el segundo y el tercero hay trece años. Desconozco las razones pero generalmente está relacionado con dos cosas: la primera, finacieramente ya la música -no hablemos del Metal- no rinde como para vivir de él y hay que hacer de carpintero, economista o cosas así para vivir, lo que deja poco espacio para mentenerse sobre la ola y segundo, diferencias creativas, separación de miembros, ese tipo de cosas. Por el apuro de escribir acerca de "Ayam" no me he sentado a hacer la tarea que me permita traerles las razones ciertas, por una vez -más- pido disculpas.
El punto es que este disco es eso que yo acostumbro a llamar 'un ataque sensorial', vale decir, una muestra de calidad que vale las sentadas que requiere entender la liturgia. En todo caso, si deciden escuchar el trabajo en comento, preparense a ser impactados por una pared buen gusto, sonidos existenciales, melancólicos, melódicos pero densos, mucha épica y grandes cantidades de cambios (lo que define en si mismo al Progresivo = progresiones). Diría que de punta a punta Disillusion ha podido hacer una de las cosas más interesantes que se vieron y oyeron en 2022, a nivel de un disco que puede ser recordado y repetido con facilidad.
Los primeros dos temas del trabajo son de buena factura, pero no son lo que mejor pinta lo que trae "Ayam", es -diría yo- a partir del tercer tema, Driftwood, que el disco se comienza a hacer grande, para entrar en zonas que se perciben completas, complejas, arregladas, de buen gusto. Me gustaría un día saber escribir de manera tal que supiera expresar el sabor que me deja en la boca una muestra como esta. La posibilidad de que una grabación transcienda es baja y en el caso de esta diría que logran el cometido.
Claramente el tema Abide The Storm -nominada como Canción del Año- es el más importante de "Ayam", también incluiría From The Embers, incluso la canción de cierre, The Brook, en ellas se encuentra el grueso de la capacidad de Disillusion de crear imágenes a traves de su excelente manejo instrumental, sus coros pegadizos y la embrujante voz semi-Core-más-bien-Alternativa de Andy Schmidt. A mi me costó un tiempo entender lo que querían decir con este trabajo, por lo que creo que en estos días en los que el ritmo baja y hay más lugar para el solaz, podrían encontrar la posibilidad de dejarse contagiar.
8.5/10