Battle Beast tuvo franca arrancada de caballo pura sangre y frenada de burro viejo de corral, su disco debut en 2011 "Steel" es uno de esos trabajos de Power que se esperan, se desean y viniendo de unos debutantes, mayor el impacto. Pero cambiaron de cantante, saliendo de la extraordinaria Nitte Valo, actualmente con Dreamtale y a quien surgiero que oigan porque es una de las mejores voces del Metal... me disgregué... pues al salir de ella y reemplazarla con Noora Louhimo (ex-Kamelot en vivo) hubo un verdadero traspié, pues con "Battle Beast" (2013) le costó explotar y "Unholy Savior" (2015) fue el extremo opuesto al debut.
Sus dos discos siguientes los oí pero no los comenté, no valía realmente la pena y ahora que vuelven con "Circus Of Doom" he decidido darles una nueva oportunidad porque pensé que tras tres años después del último trabajo y diez años de experiencia luego de grabar por primera vez me sugerían que podría haber mejora... menos mal que lo hice, Battle Beast ha decidido -finalmente- hacer un buen disco, algo interesante, con sus toques de originalidad sonora y contenidos, unido a interesantes niveles de épica y ridiculismo Power metalero contenido.
Lo primero que me llama la atención es la contenida duración de la entrega, apenas superando los cuarenta y un minutos, eso -amigos míos- en una banda con cierta trayectoria y algunos traspiés, es una indicación inequívoca que han tomado la sabia decisión de hacer un disco conciso, con lo mejor del material que han logrado crear y en el caso de la accidentada carrera de Battle Beast, un posible all-in, como en el póker, si gano sigo, si pierdo me voy. Creo que Battle Beast va a quedarse en la mesa.
El disco tiene una mezcla interesante, a veces oscura y disonante y otras muy divertida de sonidos Disco (si, el de los 70s), algo de Avant-Garde, su fuerte sensación Heavy y un Power emocionante, con alguna canción -incluso- con los méritos suficientes para pasar al imaginario popular del estilo y sin duda a la rotación de sus presentaciones en vivo, como es el caso del tema de cierre, Place That We Call Home, el cual va a quedar nominado como contendiente para disputar el glorioso título de Canción del Año de ELOMC.
Es verdad que no todas las canciones del "Circus Of Doom" tienen el mismo nivel, pero la vida es así, ya sería eso difícil (en 2011 casi lo logran), pero el trabajo es muy tragable, su duración hace que repetirlo sea fácil, no se siente pesado, aunque si repetitivo, especialmente en sus canciones finales, pero en la sumatoria final sin duda que merece la pena disfrutarlo, siendo quizás lo más importante la revitalización de la carrera de Battle Beast.
7.5/10. Buena portada.