No puede haber un sitio más inimaginable para conseguir una buena ejecución de Technical Death que Kuwait... lo siento, pero para volverme a sorprender tendrán que venir de una cueva en Afganistán... En mi usual recorrido de los últimos días me he encontrado repitiendo el sonido sólido, complejo, interesante, bien estructurado y con interesantes toques Progresivos, Sinfónicos y apenas suficientemente melódicos que Divine Disorder presenta en "Garden Of Dystopia".
Cuatro músicos cuyos nombres y fotografías claramente los identifican como lugareños de ese lejano país: Azurayl vocalista líder, Adel Alqattan y Ali Ebrahim en las guitarras, Darkvain en bajo y orquestación y Mortis - en los teclados (no acreditan baterista), presentaron este disco a finales de 2014, el cual no llegué a oír y por tal motivo voy incluir en 2015, ya que lo considero una de esas ejecuciones integrales que cualquier banda desea hacer algún día, sea cual fuera el estilo.
De entrada el buen gusto y eficiencia en el manejo instrumental es más que destacable, como debe ser una banda de Death, luego su songwriting es variado, con evidentes influencias de sonidos de grupos conocidos en el género, como Fleshgod Apocalypse, en lo que Tech-Death respecta o Symphony X, en lo que Symphonic trata. Muy interesante me resultó la forma de iniciar los temas, siempre con potencia y en búsqueda de la sorpresa, lo que unido a un buen desarrollo y la agresiva voz de Azurayl, me mueve a pensar que estos chiquillos no se van a quedar como desconocidos metaleros del desierto kuwaití, sino que pronto alinearán en sitios bien distantes a su casa.
Puede ciertamente que algunos temas, en su persecución del objetivo Progressive, deriven un poco de más, haciéndose menos intensos, pero no por ello creo que haya mucho desperdicio o relleno, si acaso en temas como The Gambit o The Puppeteer. Puede, de la misma manera, conseguirse en "Garden Of Dystopia" joyas como Enciphered III, Children Of Menace, Animus y The Arcanist, que muestran calidad, mucha agresión y una interesante manera de incorporar sonidos sinfónicos sin tener que caer en clichés que generalmente lucen forzados dentro de los temas. Aquí incluso algunos sonidos étnicos permiten algún nivel de originalidad, el cual es de agradecer.
Siendo este el primer trabajo de Divine Disorder, auto producido por demás, en el cual han mostrado tanto potencial, creo que se les debe hacer seguimiento. Es que incluso las letras de sus temas, alguna de las cuales logré conseguir, me parece que tienen sustancia y sentido... cuando alguien te dice, como en Pandora's Codex '...By opening the gates to the ancients/and the divine foundations of the universe/Let there be… Disorder...' se sabe que el disco va a ser emocionante :-)
Ojalá sigamos teniendo noticias de Divine Disorder en el futuro, siempre será de agradecer que haya quien haga algo bien.
8/10