¡Naaah! Debería haber una ley que prohíba a las bandas sacar discos por no dejar. Es casi una injusticia que después de su excelente "Κατά τον Δαίμονον Εαυτού" (2013) venga ahora Rotting Christ a mostrar un disco que si bien se encuentra ubicado en la zona pasable, no es esa que muestra la carga de originalidad y brutalidad que han sabido enseñar, enfocándose en exceso en la perspectiva demoníaca teatral, pero sin demasiada sustancia musical. Sólo sonidos aceptables conforman "Rituals"
¿Como me explico? Este es un disco cuya casi única perspectiva es esa necroreligiosa visión del Black, mucho adorar al ángel caído, muchos cánticos oscuros y marchas de ritmo Doom y poco Metal, del que rompe y destruye, de ese que venían haciendo hasta su disco anterior en el que la melodía y la aridez se unían en una amalgama genial, como sólo estos griegos saben y les granjean seguidores en todo el mundo. Ahora "Rituals" sólo contiene algunos de aquellos ejemplos.
Efectivamente el paso del tiempo ha producido en mi gusto un fenómeno que no se si es similar al de mis contemporáneos: a más oigo Metal más tiendo hacia el sector extremo. Por eso puede ser que este nuevo trabajo de los griegos legendarios (recordemos que tienen en esto desde finales de los 80s) me deja un sabor de boca amargo. Los estaba esperando con ansias, ya que creo que en toda su discografía no hay un sólo disco que pueda tildarse de 'flojo' y ahora, aunque "Rituals" no llega a ser tampoco un desastre, no esta a la altura de lo que RC ha sabido traernos.
Algunos temas sobresalen, quizás los que más me atrajeron son Elthe Kyrie, Tou Thanatou y The Four Horsemen (la mejor del disco), pero en términos generales a "Rituals" le falta songwriting. Aquellos blastbeats, aquellos teclados ominosos y su guitarra telúrica se escuchan menos aquí, se pierde la dirección. Reitero que me parece que se enfocaron en exceso en el elemento lírico y de espectáculo, dejando de lado el fundamental componente musical. Muchas campanas, rezos, espadas, cantos negros e invocaciones tuvieron en mi un efecto contrario al perseguido, en vez de sonar aterrorizantes, a veces me parecieron de poco impacto, cuando no -en el peor de los casos- cómicos, como en Apage Satana.
Lo voy a poner asi: Rotting Christ había realizado hasta ahora discos serios de Metal extremo, pero con este trabajo el componente satánico y crudo se excedió, resultando en una grabación con momentos caricaturescos, menos impactantes. Adicionando esto a ciertas horas bajas en los elementos musicales (riffs escasos, hooks poco potentes e inusual pobreza vocal de Sakis Tolis ), el resultado se me antoja mediocre, aceptable como máximo.
Daré por aprobado con la nota mínima el trabajo, en la espera que este disco sólo sea un traspiés y la banda vuelva a su sendero de impacto y emoción del que han dejado evidencia en no menos de diez discos anteriores.
5.5/10