El Lado Oscuro Metal Critica

Heavy Symphonic Death Black Power Folk Progressive Viking Epic Gothic Folk Melodic Neoclassic Stoner Technical NWOBHM Melodeath Speed Avant-Garde Thrash Psychodelic Brutal Post Art Atmospheric Extreme Gothic Doom... críticas, comentarios y reviews en español de Metal desde España y Venezuela... pero sólo a veces

jueves, 30 de octubre de 2014

Ne Obliviscaris - "Citadel" (Blackened Progressive / Avant-Garde / Symphonic)

"Citadel" de Ne Obliviscaris debería -según mis cálculos- cerrar oficialmente el ciclo de grandes lanzamientos de 2014, aunque siempre podrá venir algo adicional. Igual me encuentro esperando el nuevo trabajo de Triosphere, pero no se si abrigar esperanzas porque el tema que han adelantado no es nada especial; lo cierto es que a nadie cercano al Metal, cualquiera sea el género de elección, que no haya estado viviendo debajo de una piedra, le va a sorprender este disco; es más, me atrevo a afirmar: Ne Obliscari puede ser la mejor banda reciente y seguramente es una de las más influyentes de los últimos años. "Citadel" sólo tiene por objeto confirmarlo.


Ahora bien, dicho lo anterior también debo puntualizar: Ne Obliviscaris es una banda que hace música selecta, compleja, para un público que entiende bastante más que el sentido promedio del Metal, ya que mezcla una miriada de sonidos y estilos que pueden confundir fácilmente a los oidores más casuales o a aquellos atraídos por el sonido crudo, frontal y despiadado, por ejemplo, del Black puro. 

En "Citadel" se puede diferenciar claramente el elemento Progressive o Blackened Progressive como base fundamental sobre la que se colocan conceptos Avant-Garde, Sinfónicos y Death, amalgamados con un uso instrumental que sólo puedo calificar como exquisito. Tanto batería como bajo se regodean en una ejecución preciosista y que unida a una guitarra de calidad, pero que en mi gusto podía haber sonado más, irrumpe el uso de un violín casi desconocido en estas lides, como no sea en otros géneros, como el Folk.

El disco es magistral en su ejecución, aunque tiene zonas en las que deriva demasiado, se ensimisma por momentos, lo que a mi me gusta, pero estoy convencido que muchos percibirán como zonas débiles. Sin embargo creo que "Citadel" no puede -al menos, no debe- ser escuchado sin haber pasado antes por "Portal Of I", el primer larga duración de estos australianos y de esa manera estoy seguro que eso que algunos pueden percibir como 'letargia' en algunos segmentos, los que oigan antes su disco debut reconocerán como la continuación de un camino. 

Y aquí quiero detenerme: Ne Obliviscaris no es una banda buena que está haciendo buenos discos, no. Esa sería una perspectiva limitada de lo que aqui está pasando. Ne Obliviscaris está experimentando con un nuevo segmento dentro del Metal Progresivo/Sinfónico duro y posiblemente está ofreciendo el sonido más revolucionario desde que el Nu hizo aparición para afectar -negativamente desde mi humilde perspectiva- las ondas negras del Metal.

"Citadel", con sus seis canciones, pero especialmente con Painters Of The Rempest (Part II) - Triptych Lux, Pyrrhic y Devour Me, Colossus (Part I) - Blackhole, representan una forma exótica, intrigante y espectacular de enviar el mensaje que bandas como Black Sabbath, Death, Dream Theater y Venom o Celtic Frost enviaron en su momento y junto con "Portal Of I" deben convertirse en una referencia en los libros que escriben de Metal.

Growls, voces limpias e instrumentos eléctricos y acústicos magistrales; elementos conceptuales Avant-Garde; intrincados ritmos y cambios vertiginosos en ellos salidos de lo mejor del Prog; sonidos todos que, entremezclados, transportan a zonas vaporosas del Sinfónico y luego se lanzan en picada a los avernos del Black, unidos a una producción prístina, hacen de este un trabajo para atesorar, de una banda que pasará a la historia y de la que ya se escribe.

9.5/10. Trigésimo seleccionado para competir como Disco del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica, convirtiendo 2014 en un de los mejores años del Metal.

lunes, 27 de octubre de 2014

Anaal Nathrakh - "Desideratum" (Black / Avant-Garde / Grindcore)

Anaal Nathrakh está en el sector más intenso de lo que yo oigo regularmente, es una banda que no es para todos gracias a sus crudos, desgarradores y áridos temas, los cuales mezclan, sobre un lienzo Black, mucho de Avant-Garde, Grindcore y algo de Noise. Sin embargo estos ingleses tiene una manera especial de transmitir sensaciones que supera con mucho el placer de ser extremos puramente. Quien les ha prestado atención seguramente ha descubierto elementos melódicos y estructuras rítmicas sorprendentes, siendo su toque particular que esos elementos subyacen bajo la enorme agresión con la que impactan al oyente.


Yo precio a su disco de 2012, "Vanitas", como uno de los mejores discos del Black, siendo una verdadera joya, pero reconociendo también que es uno de los discos más difíciles de oír. Sin embargo, cuando tengo los humores alterados y necesito aridez, fuerza y contundencia en el sonido, vuelvo a él y me consigo satisfecho en esos deseos. Es por ello que otro de los discos que anticipaba con tantas ansias era su "Desideratum", con el cual venían amenazando hace unos meses y que finalmente ha llegado y que con satisfacción puedo decir es bueno, no tanto como su anterior, pero es que alcanzar ese nivel no es siempre posible... ni siquiera para ellos.

En cualquier caso, si de darse un baño de sonido estentóreo, crudo e intenso se trata, no vayan más lejos. Nuevamente con "Desideratum" hay que agarrarse duro a lo que haya cerca para no caerse por culpa del golpe sonoro que su intensidad trae, mientras mantienen esa forma tan peculiar de hacer Metal en la que las capas de elementos mucho más complejos que el sólo Black se mezclan y producen una gran imagen cubierta de matices, grises, negros, marrones, a los que sonidos melódicos mezclan y dan una coherencia diferente a la del Drone o el Noise puro que bandas como Indian mostró a comienzo de este año.

No se me adelanten tampoco los que está leyendo este comentario y esperan descubrir algo accesible en un sector oscuro del Metal... hay que tener cierto estómago para darse el lujo de entender y apreciar el trabajo de Anaal Nathrakh. Esto es un trago intenso, que para quien no esté preparado, puede implicar un asalto sensorial extremo. No es música para relajar los sentidos, ni para acelerar el paso... es agresión pura, dura y extrema. A modo de ejemplo diré que, como se acerca la tradicional fiesta hispanoparlante de Halloween, podrían usar este disco para asustar niños XD.

Bromas apartes, el disco, con sus once canciones de entre tres y cuatro minutos, con una grabación especial y deliberadamente alta y distorsionada, realizada así para reforzar su agresión, tiene temas que valen mucho el rato, como Idol, Desideratum, Acheronta Movebimus y Unleash. Aunque, haciendo la incómoda comparación con su anterior, siento que en el contexto general "Desideratum" pierde algo de la capacidad de asombrar que habían mostrado. Si tengo que definirlo con una metáfora diría que "Vanitas" es la banda sonora de los psiquiatricos, mientras que "Desideratum" aunque tiene excelentes canciones, es menos intenso, de menos locura y musicalmente menos elaborado, algo más sencillo.

Sirva de todas maneras este humilde comentario para recomendarlo y a la vez sugerir la necesaria preparación anímica para descubrir o seguir descubriendo lo que una banda tan intensa y cruda como Anaal Nathrakh es capaz de hacer, para mayor gloria del Metal extremo. Aunque posiblemente sea solo para metaleros reforzados, "Desideratum" si tiene mucho que ofrecer.

8.5/10


martes, 21 de octubre de 2014

At The Gates - "At War With Reality" (Melodic Death)

At The Gates no es una banda de Death Melódico, es la banda de Melodeath. Sus componentes, fundamentalmente los mismos desde inicios de los años noventa, crearon allá en su natal Suecia lo que hoy se conoce como el 'Sonido Gotemburgo' con el sencillo -pero clave- movimiento de poner en su disco "Slaughter Of The Soul" (1995) algo de más melodía al Death / Black que venía desarrollándose desde hacía unos diez años en países como Suiza, Alemania y Noruega (historia patéticamente reducida y resumida a su mínima expresión). Total... crearon un género atacado por los puristas, incluso hoy en día, pero amado por los metaleros más dispuestos a la novedad.


Para ser franco, At The Gates no necesitaba grabar "At War With Reality"... lo cierto es que a pesar de tener más de quince años sin nuevas grabaciones (y casi veinte de nuevo material), seguían haciendo, desde su vuelta en 2007, giras y conciertos por todo el mundo, con pleno reconocimiento y sonando en vivo tan potentes como la mejor de las bandas. Yo doy fe de eso tras haberlos presenciado aquí en Caracas hace un par de años. Aún así, por razones que no necesariamente están claramente establecidas para mi, presentan este nuevo material, el cual es una sorpresa, por varios motivos, los cuales paso a exponer.

"At War With Reality" es un disco que podía haber jugado sobre seguro, con -digamos- diez canciones al estilo que hoy se hace Melodeath (algo o bastante más Atmosférico) y listo, todo el mundo a alabar a sus dioses metalero, todo gracias a la enorme fama que precede a At The Gates. Sin embargo es un trabajo que evita caer en un lugares comunes y muchísimo menos -las fuerzas oscuras nos libren- ser un disco facilón. Muy por el contrario, este disco lleva tiempo en digerirse, pues tiene un sonido agridulce muy específico y creo que nunca, nunca... pero nunca! se hizo con el objeto de satisfacer egos musicales o masas enardecidas.

Y digo que a "AWWR" le va a llevar tiempo calar en el gusto de los fanáticos, pues es altamente intenso y crudo, rápido y de fuerte agresión, con sólo la suficiente melodía para hacerlo paladeable dentro de los cánones del género que el mismo At The Gates inició, sin embargo este disco hace algo que muy pocos: atrae, atrapa, entumece los sentidos y en sus apenas cuarenta y cinco minutos, puede dejar a cualquiera hecho una piltrafa. De hecho, podría asegurar que la sorpresa que se tenía guardada, como es el tema de abrir, la lectura -incluso con acento ligeramente sureño- del fragmento del libro de Ernesto Sábato, "Sobre Héroes y Tumbas", ha debido resultar impactante para muchos, como lo fue para mi.

Me siento fuertemente impresionado porque el trabajo, a pesar de su novedad sonora, saber mostrar lo que la banda trae como bagaje musical. At The Gates está sin dudas vivo y goza de excelente salud. Pudo haber mostrado señales de envejecimiento, de letargia e incluso de desubicación astral y no lo hizo, esta es una excelente manera de decirle al mundo del Metal que no sólo podían hacer un nuevo disco y que tenían el material, sino que estaba totalmente justificado. Incluso a pesar de los años de separación entre los miembros a finales los noventa y bien transcurrida la primera década de 2000, "At War With Reality" claramente no es la reunión de una banda nostálgica, es una demostración casi ridícula de calidad musical y fuerza sonora a la que muchos sólo pueden soñar llegar algún día.

No se si "At War With Reality" será el último disco de At The Gates (no lo creo y me parece que no van a hacernos esperar otros quince años), pero si llegara a ser el caso, es el mejor colofón posible a una carrera que sólo puede ser señalada como admirable. Muy pocos pueden arrogarse ser los iniciadores de algo y mucho menos mantenerse, a pesar de las dificultades, entre los mejores, pero estos suecos han demostrado mucho más de lo que hoy por hoy es norma en la industria, no sólo del Metal, sino de las artes en general.

Cualquier canción está a nivel mágico y no voy a entrar a comentar una por una, ya que, por un lado es un disco integral puro, sus piezas son más grandes que el todo ya que cualquiera es compleja y tomará tiempo para terminar de analizar sus detalles, aunque si tuviera que señalar una, diria que The Book Of Sand (The Abomination) puede que sea la mejor. 

Me pregunto si el mundo está listo otra vez para At The Gates y no al revés. 

10/10. Vigésimo noveno y muy serio competidor a Disco del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica.


jueves, 16 de octubre de 2014

Quickie 4 - Dream Theater - Lepoka - Amaranthe - Blut Aus Nord

Dream Theater - "Breaking the Fourth Wall (Live from the Boston Opera House)" (Progressive): Rarísimamente hago mención a EPs, compilaciones y discos en vivo, realmente porque es tanto lo que hay nuevo casi a diario que no le veo demasiado sentido, más sin embargo si los escucho. En este caso hago la excepción porque el disco triple de de los maestros del Progresivo, duelale a quien le duela, es magistral y merece reservarle un espacio en la agenda para disfrutarlo. Nada nuevo en el material, pero la ejecución, incluyendo los elementos sinfónicos son del mejor nivel posible. No le aplica una nota, pero si de dársela se tratara, incluyendo su producción, le daría una muy alta, posiblemente el mejor disco en vivo del año. Escucha obligatoria.

  
Lepoka - "Folkoholic Metal" (Folk): Aún cuando su instrumentación es relativamente buena y los toques Folk celtíberos de la gaita le quedan muy bien, la voz me convenció muy poco, pero especialmente el sentido caricaturesco en el que cae la banda al ejecutar sus temas. Tiene algunos momentos, dentro de ciertos temas que son resaltables, pero en general no es de lo mejor que el Folk ha presentado este año. Sin embargo, si en una próxima entrega -aun riéndose de ellos mismos- no se rieran de la música que hacen, error en el que caen y que es lo que al final me quedó de este disco, creo que podrían mejorar mucho, pues potencial tienen.
5/10

Amaranthe - "Massive Addicted" (Modern): Parece que por fin Amaranthe ha decidido sacar un disco acorde a sus capacidades individuales. Ya no suenan a Britney Spear en una mala noche y especialmente el ritmo que ejecuta una excelente batería les gana enteros. La guitarra también está bastante bien, Luego del terrible "Nexus", trabajo que me había parecido dentro de lo peor posible en el Metal, con este disco levantan cabeza... dentro de lo razonable, tampoco se crean que es la segunda venida del Modern. Mejoraron, en cualquier caso, pero todavía no presentan algo a la altura de su disco debut, "Amaranthe".
6.5/10

Blut Aus Nord - "Memoria Vetusta III - Saturnian Poetry" (Atmospheric Black): El anterior trabajo de esta banda "777 - Cosmosophy" me pareció una de las grandes contribuciones al sub-género y en esta oportunidad también traen elementos que atraen y seducen, aunque es un poco menos impactante, posiblemente por un cierto cambio de enfoque que parecen haberle dado a la ejecución, con un sonido menos ensimismado y exploratorios, menos Avant-Garde. Aún así merece la escucha. A los amantes del Atmosférico estoy seguro que les va a gustar, a mi lo hizo.
7.5/10

miércoles, 15 de octubre de 2014

Exodus - "Blood In Blood Out" (Thrash)

Si se agarra y se mezcla agresión, guitarras rápidas, ritmos frontales y letras que hablan de política, juventud descarriada, cerveza y sexo... ¿Se tiene un disco de Thrash?... sip, más o menos, al menos en la estructura. Ahora, ¿auguran la unión de esos elementos un buen disco de Thrash?... nop. Algo así parece haberle sucedido a los experimentados miembros de la banda Exodus. Tienen todos los elementos de un disco de unos de los géneros más populares del Metal y sin embargo, es un disco regular, ni muy bueno, ni muy malo. "Blood In Blood Out" diría que no pasará a la historia como lo más excelso de su discografía.


En primer lugar vamos a puntualizar el más importante error logístico de este trabajo. El Thrash, así como con el Brutal son géneros demasiados intensos para canciones de casi seis o más minutos y el disco tiene ocho de sus doce temas en ese rango ¿Que carajo se va a decir en seis minutos que no haya dicho en los primeros tres o cuatro, cómo no sea saturar al oyente? Para este tipo de música es tan antinatural como para el Punk... no me imagino a Ramones tocando una canción por siete minutos, a los tres ya se soltó todo. Increíble error para una banda que tiene casi treinta y cinco años en escena (con sus paréntesis, claro), aunque el segundo regreso de 'Zetro' Souza parecía dar cierta garantía de 'vieja escuela' no ocurrió así.

Luego, los temas son genéricos, en general bien desarrollados en lo que al uso de la guitarra merece, la cual es el elemento que más y mejor destaca, ya que en manos del legendario Gary Holt se siente cómoda y fuerte. Sin embargo el disco, en perspectiva general, no es ni muy emocionante, ni muy agresivo, ni muy divertido y el Thrash o es uno, u otro... u otro, o se hace genérico. "Blood In Blood Out" es eso, Thrash genérico. Sirve para darle una clase a los más jóvenes: 'esto se toca así'...

No diré que es un mal disco, tiene temas interesantes, como Collateral Damage, Salt The Wound y la mejor del disco, Body Harvest, pero no es precisamente 'interesante' lo que yo busco cuando escucho este estilo, menos aún cuando la ejecución proviene de uno de los íconos musicales del Metal. Hay que recordar que estos americanos están, por derecho propio, en esa segunda línea de salvación de Metal de las garras del Grunge que en los 90's con Nirvana a la cabeza y el movimiento de Seattle detrás, casi acaba con él. 

Entiendo que hay mucha gente a la que el disco le ha fascinado y creo que hay ciertos méritos que reconocerle. Su velocidad, guitarra y vocalización de Zetro son ciertamente atractivas, pero para mi, su songwritting (algo así como decir 'lo divertidas o emocionantes que son sus canciones') dejaron que desear... definitivamente, a mi humilde entender, pudo ser mejor. Sin embargo, se puede oír con gusto y seguramente un concierto sería digno de ver, a pesar de lo largo de algunos temas.

La salida de Exodus del vocalista desde 2005, Rob Dukes, puede haber influido en el juego sobre seguro que percibo en el trabajo y del deseo de mantener contenta a la base de fanáticos de la banda, lo cual seguramente lograron, sin embargo y repito, para mi que no soy un seguidor específico del Thrash y que me cuesta sentirme atraído por el género, habría querido más, más garra, más intensidad y menos sonidos estandarizados. Diría que el disco está hecho para que los fanáticos específicos se encuentren en su zona de confort y sea más adelante, cuando se compruebe que el regreso de Zetro valió la pena, que se intenten movimientos más arriesgados.

6.5/10, a despecho del odio de las masas fieles a sus dioses metaleros.


lunes, 13 de octubre de 2014

Helevorn - "Compassion Forlorn" (Doom)

El Doom es un género muy especializado si se viene a observar bien. A pesar de que tiene su base de seguidores es complicado conseguir a alguien que te diga 'coño!, mi grupo favorito es X que toca Doom!'... eso no pasa mucho. Y es que una forma de hacer Metal que es sentimental -no sensiblera-, lenta o muy lenta, cómo llega a ser en el Funeral Doom, no digamos extremos como el Depressive, no es precisamente lo que la base metalera busca, quienes más bien se enfocan en velocidad, agresión y ¿dije velocidad?


De hecho este año -y todos los años- hay pocos discos de Doom, realmente pocos, muchos menos de los que debían haber. Para muestra no creo equivocarme contando los que aquí -humildemente- se han reseñado hasta la primera quincena de octubre: dos. Y ambos excelentes... pero eso es lo que digo y que es a su vez sorprendente, ya que esa paradoja envuelve en sí misma la respuesta: No hay muchos discos de Doom porque no hay muchos buenos músicos, porque -argumentando de forma circular- sólo buenos músicos se dedican al Doom.

Ahora, que 'además' sean unos españoles (¿se nota la estigmatización?), perfectos e ilustres desconocidos en mi limitada visión del Metal, los que se disparen este discazo, es merecedor de atención (y un regaño a mi ignorancia), ya que "Compassion Forlom" de la banda de las Islas Baleares, el sexteto Helevorn, es una prueba palmaria de que un buen disco de Doom generalmente es mejor que casi cualquier otro buen disco de cualquier otra cosa. Y es que no hace falta sino un buen repaso para caer en cuenta que estamos ante uno de esos trabajos destacados del año, sea cualquiera que sea el ritmo en el que se escuche el Metal de elección.

La intensidad, musicalidad, atmósfera, songwritting e instrumentalizacion de este, el tercer disco que entrega la banda, conforma un trabajo redondo y seguramente será reconocido en temas como Delusive Eyes, el mejor del disco y nominada a Canción del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica, The Inner Crumble,  Unified y Reasons To Die Last, como una excelente entrega, la cual, con sus fuertes guitarras, melodía suave pero contenida, sin excesos melosos del sintetizador, un excelente growl y mejores coros, es una contribución al necesitado espacio Doom.

Si de influencias se tratara diría que en Helevorn se perciben sonidos de grupos como Candlemass y Saturnus, pero el propio carácter de la banda está claramente impreso en sus elementos Dark. Sin embargo sigue siendo Doom, puro y duro, en el que los elementos atmosféricos, críticos para que el trabajo no se pierda en el aturdimiento de un ritmo tan específico, se han desarrollado de forma magistral, junto con ese sentimiento de tristeza sobrecogedora que, de forma notable, logran transmitir y que es otro de los elementos con los que enriquecen el disco.

En general "Compassion Forlorn" me complació por ser especialmente potente, bien realizado y producido, a pesar de algún tema menor, como I Am To Blame. Mención aparte voy a hacer del tema Els Dies Tranquils, cantado parcialmente en catalán... la cual me pareció muy buena, pero se sentía como que no pertenecía al disco... me sonó a bonus... bueno... no me hagan caso, o si, quizás algún día averigüe si estoy en lo cierto y les cuento. Recomiendo -finalmente- disfrutarlo como yo lo hice: una noche de fin de semana, con las luces apagadas, navegando por la red y sumido en el sonido. Les auguro un rato de buen Metal, al que habrá que volver y seguirle la pista a Helevorn en el futuro.

8.5/10. También la portada queda nominada a competir en ese renglón.

viernes, 10 de octubre de 2014

Appalachian Winter - "The Epoch That Built The Mountains" (Symphonic Atmospheric Black)

Appalachian Winter es un grupo americano oscuro (lo de grupo es un decir, ahora son dos componentes), conocido sólo en su ambiente específico y con un estilo que si de definirse se tratara, diría que es Symphonic Atmospheric Black, el cual, con su disco anterior, "Ghost Of The Mountains" (2013), me pareció que hicieron un trabajo sobresaliente y convirtiéndose en uno de esos discos que repaso de cuando en cuando. Recomiendo descubrir ese trabajo.


Con su nueva entrega "The Epochs That Built The Mountains" el incremento en el componente electrónico y uso de los sintetizadores afecta desfavorablemente el resultado final, ya que se siente menos orgánico, menos crudo, con menos elementos Black y Folk de los que habían presentado en el pasado, lo que desafortunadamente me parece se percibe como un retroceso con respecto a lo hecho. También me ha resultado excesivamente melódico, a pesar de que las voces todavía tienen calidad y el uso de la guitarra está bastante bien.

Puede que lo que menos me haya satisfecho de "TETBTM" sea los elementos percusivos, los cuales son artificiales, a veces pareciendo salir de un beat-box, aunque sólo en su sonido, no en el ritmo, ya que evidentemente suenan tocados por un ser humano. Sin embargo los elementos atmosféricos son preciosistas y bien ejecutados, con sentimiento y profundidad, dándole ese toque invernal, esa coloración que en mi mente se hace azul oscuro, como la de una noche que cae, lo que finalmente es un gran aporte.

El disco está compuesto por diez canciones, melódicas o muy melódicas, sin la duración típica que este trabajo acostumbra a sugerir, que generalmente supera los diez minutos, sino que por el contrario limita a seis, como máximo. Uno de los problemas del disco es su irregularidad, que al contrario del anterior, donde hubo homogeneidad, aquí, algunas canciones exceden el sonido dulce o decaen, como Clay Becomes Stone, Rise To The Heavens o The Last All-Land, que suenan mucho -salvando la distancia de las voces- como a alguna banda Euro Pop de los ochenta (Human League se me viene a la cabeza) y dejan poco espacio a ese Black/Folk intenso que caracterizó a "Ghost Of The Mountains" Algunas de ellas, sin embargo, regresan al excelente sonido que en discos anteriores he disfrutado de la banda, tal como la mejor del disco y que vale la pena el rato, Hymn To The Ancient Mountains.

El disco tiene la particularidad de estar muy bien producido y masterizado, con un rango dinámico bastante superior a lo que hoy se consigue, llegando a marcar hasta 9 dB, lo que públicamente le agradezco a la banda y me hace pensar que su interés en la percepción general de su trabajo es bien relativo al no seguir la corriente del Loudness War, que tantos buenos trabajos ha desgraciado.

Por esta oportunidad voy a sugerir oir el disco sólo para no saltarse la continuidad del trabajo de Appalachian Winter, pero lamento creer que sus excesos melódicos y sonidos saturadamente electrónicos no lo van a convertir en un favorito. Tampoco de las portadas la banda se ha esperado nunca mucho, no siendo esta la excepción. Sosa, cuando menos.

6/10




miércoles, 8 de octubre de 2014

Scar Symmetry -"The Singularity (Phase I - Neohumanity)" (Modern Melodic Death / Progressive)

El anterior disco de Scar Symmetry, "The Unseen Empire" (2011), es uno de los mejores discos que he escuchado, es realmente completo y ha tenido una virtud muy rara: envejece bien. Eso me obliga a acercarme con cautela a su nuevo trabajo puesto que no es precisamente una regla, hoy por hoy, que una banda se suceda con buenos discos... pareciera que la norma es sacar uno bueno y comenzar a construir a partir de ahí, al menos en la mayoría de los casos. Posiblemente tenga algo que ver con el deseo de éxito comercial, pero ¿quién soy yo para saber de eso?


Ciertamente me siento un poco aturdido en estos días -musicalmente- porque (ya lo he venido comentando) la cantidad de buen y muy buen Metal que nos envuelve en estas fechas es impresionante. Ya se acordarán de mi cuando a partir de noviembre y hasta el mes de marzo o abril vean que son pocos los discos mágicos que aparecerán. Y aturdimiento es un buen término para comenzar a hablar de "The Singularity (Phase I - Neohumanity)", primero de una esperada trilogía, el cual, como es de esperar y es sello diferenciador de estos inspirados metaleros, desarrolla un complejo y elaborado concepto acerca de una nueva inmortalidad basada en la resurrección digital... está muy divertido seguir las letras, pero puede ser demasiado friky para algunos.

Ahora, más allá del concepto lírico, la música... la música! Este es un disco muy bien realizado. Death Melódico bastante, pero menos que antes y altamente desarrollado en la instrumentalización, especialmente en el trabajo de la guitarra, sin menospreciar el mesurado uso de los sonidos electrónicos del sintetizador y excelente ritmo, agresivo y potente, lo que, con el gran growl de Roberth Karlsson, que junto con los emocionantes coros liderados por Lars Palmqvist -lo mejor- hacen del disco un placer, aunque -recuerden- tiene su lado complejo: no es un disco de 'andar por casa', es un trabajo elaborado, multinivel, que -como el grupo ha dejado claro- es su intención realizar, con largas secciones Progresivas que, más que nunca, se esmeran en desarrollar y parece el sector al que se dirige la banda en el futuro.

Canciones como Cryonic Harvest y Limits To Infinity son un claro avance en el desarrollo de su puesta en escena, y hacen que este disco mantenga sus enteros, entrando definitivamente de lleno -para mi- a formar parte de la élite del Metal 'inteligente', ese que requiere más que oídos y necesita cerebro para entender esa forma de desarrollar este arte de manera integral, llenando los sentidos y también los sentimientos. Yo diría en que la historia de Scar Symmetry se puede sintetizar escuchando el último tema del trabajo, Technocalyptic Cybergeddon, con la que en diez minutos vierten todo lo que han sido y han llegado a ser. Para mi, esta canción, con sus cambios, ritmo, atmósfera y fuerza tiene que estar dentro del tope de temas individualmente considerados del año y queda por tanto nominada a Canción del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica, como gran contendora.

Sugiero darle la oportunidad a "The Singularity (Phase I - Neohumanity)" porque puede ser algo intenso y empalagoso para los gustosos de cosas más directas, pero estoy seguro que, como su trabajo anterior, soportará bien el embate del tiempo.

9/10 (antes 8.5/10)

ACTUALIZACIÓN DEL 16/10/2014: La verdad he seguido escuchando tanto este disco y me he maravillado tanto con sus detalles que creo que pude haber obviado algunas cosas en una primera instancia ya que donde sentí cierto relleno, ahora -en perspectiva-, creo que puede haber un sentido complejo, difícil de percibir en una primera instancia y que justifican su incorporación. Por eso voy a tomarme la libertad, como lo hago un o dos veces al año, de corregir mi nota inicial y llevar este disco a un sólido 9/10, para incorporarlo directamente como contendor a Disco del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica, el vigésimo octavo.

martes, 7 de octubre de 2014

Evergrey - "Hymns For The Broken" (Progressive / Power)

Cuando a finales del año pasado el guitarrista Marcus Jidell presentó el trabajo "Avatarium" bajo el nombre de una banda homónima, pero que creo que es considerado sólo un proyecto paralelo, se percibió en el ambiente metalero una sensación general de que se estaba ante la presencia de un grupo de músicos a los que había que seguir, ya que lucía como que cada uno de ellos había alcanzado un nivel de ejecución excelso y que lo que como grupo, o individualmente considerados, podía venir de ellos, debía ser objeto de atención. No estaban equivocados mis oídos, ya que la formación en la que Jidell presta su habilidad de forma estable, los Progresivos de Evergrey, se han lanzado con uno de los buenos discos del año.


"Hymns For The Broken" es difícil de encasillar en un género específico, tiene Heavy, Power, Prog y Sinfónico, incluso AOR y sin embargo no es un amasijo de sonidos, es -por el contrario- sentimiento. Un disco como pocos, que no siendo de esos géneros en los que sobresale la emoción, como el Black Atmosférico o el Melodeath, se presta para mantener al oyente -al menos a mi- al borde del asiento, casi nervioso, esperando cada nuevo acorde, cada cambio, cada riff.

Y no es un disco fácil, puede resultar 'oscuro' para ser Power, 'uniforme' para ser Prog y 'adulto' para ser Heavy y sin embargo, cala y cuando se entiende, lo repites, porque tiene nuevos sonidos para descubrir... 'ruiditos' diría mi esposa. Elementos que embelesan, que hacen de "Hymns For The Broken" un placer y un orgullo ser seguidor del Metal, aún cuando no sea este de ese Metal que enerva, sacude o agrede... sino uno más cariñoso :-)

El final del año ha venido con fuerza (más o menos siempre es así) las mejores bandas dejan las sorpresas para el final, todavía quedan por escuchar lo que prepara At The Gates o Triosphere y sin embargo no lo digo en tono de queja. Lo cierto es que no he escrito mucho recientemente porque he sufrido la pérdida de un ser querido, pero si he escuchado mucho Metal, del que me transmite emoción, quizás para amortiguar los sentimientos duros y está claro que lo que durante estos días me ha llegado es de primer orden. 

Evergrey se une con "HFTB" a la lista de bandas que deben ser escuchadas con detenimiento, pues no escatiman con en instrumentación, alejada de lo que en el Prog realiza Dream Theater ciertamente, pero con fantástica claridad, intensidad, fuerza y musicalidad, sin hacerla sencilla, ojo que no, pero con un sello de calidad grabado indeleble. Canciónes como The Awakening, A New Dawn, King Of ErrorsBarricades -la mejor-, Black Undertow e -increíblemente- la fantástica balada Missing You, sirven para que estos suecos se luzcan en todos los niveles, especialmente la voz de Tom Englund y la guitarra del nombrado Jidell, con temas largos, pero no demasiados; complejos, pero no inescrutables y hermosos, pero no fáciles. 

Yo creo que "Hymns For The Broken" va a terminar alto en más de una lista de 2014, año que por cierto se está haciendo particularmente difícil en lo que a la escogencia de lo mejor respecta, lo que sin embargo es un placer, ya que eso sólo habla de lo bien que lo he pasado. A pesar de algunas excepciones, como la canción The Fire, especialmente sus coros infantiles, este disco me encantó, es balanceado, emotivo, excelentemente producido y muestra el progreso de la banda, siendo lo mejor que han presentado hasta el día de hoy.

8.5/10. Oir, repetir.

lunes, 6 de octubre de 2014

Galneryus - "Vetelgyus" (Neo Classical / Power / Progressive)

El Japan Metal (o J-Metal), es un incomprendido, como casi todo lo oriental, pues para nosotros los occidentales los toques exagerados, dramáticos y estilizados -a lo Teatro Kabuki- de sus expresiones artísticas son muchas veces empalagosos y percibidos como sobreproducidos... por eso este disco de corte Neo-Clásico Ultramelódico y el Visual Kei que lo apareja, si no se entiende su trasfondo cultural puede parecer una fiesta de cumpleaños de niños, en la que sirven crack... el ejemplo más memorable y para mi el mejor, es lo que hizo, ya hace unos cuantos años, X Japan, epítome no ya del Metal, sino de la música de Cipango.


Pero luego de X Japan ha habido vida y en abundancia, The GazettE, Phantasmagoria, Deathgaze y otras son buenos ejemplos... y Galneryus, 'los prolíficos' -habría que decir-. Estos Power, Progresivos, Sinfónicos y sobre todo Neo-Clásicos metaleros, son un espectáculo ambulante y tienen en sus venas música como para hacer cosas casi impensables según los estándares de hoy, como es sacar hasta dos discos en un año y seguro al menos, uno cada trescientos sesenta y cinco días, casi todos con algo que ofrecer... pero eso es en sí mismo un peligro. ¿Cómo distinguir un disco de otro si el estilo es tan específico?

Fácil, presentando un disco tan emocionante y bueno como "Vetelgyus", el cual es su mejor trabajo hasta la fecha; luego de once discos y cinco EP, han logrado una coherencia de sonido y un nivel de songwritting que obliga a repensar qué es lo que habían hecho y hasta dónde podían llegar. 

Yo sinceramente creí que con "Phoenix Rising" (2011) habían alcanzado su tope, pero craso error: este disco tiene una sensacional manera de trabajar el Neo, en la que -por fin- a alguien, posiblemente a su cantante Syu, se le ocurrió que la exhibición pura de guitarra no era necesariamente el único elemento que creaba los mejores momentos del género y elaboran, con "Vetelgyus", un trabajo de sonidos más integrales, más de todo, sin quitarle protagonismo a instrumentos que necesitaban estar ahí, como por ejemplo un descomunal bajo que retumba a lo largo de todo el trabajo, pero que especialmente en el tema Enemy To Injustice, junto con un ritmo cambiante y espectacular, se convierte un regalo para los amantes del buen rato metalero. Esta canción merece y está nominada a Canción del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica, por emocionante, por buena, por espectacular.

Influencias de sonidos del Power europeo, imprevisibles cambios de ritmo totalmente Progresivos y hasta elementos Folk, hacen de este un disco muy elaborado, sin el 'Baby Metal' que tantas veces ha estropeado trabajos que venían bien. En general casi cualquier tema es disfrutable, con la excepción de la sosa Attitude To Life, aunque la grabación del disco sea regular y aquí me detengo: Este podía haber sido un disco perfecto, uno de los mejores del año, pero con una grabación en la que el rango dinámico apenas supera los 4dB es difícil obtener ese sonido orgánico que una buena grabación necesita. Lo siento en serio por Galneryus pues "Vetelgyus" está elaborado para trascender. Ojalá, aunque difícilmente ocurrirá, algún día haya una remasterización que permita disfrutar de esta joya, con el sonido amplio que se merece.

En cualquier caso, casi sin errores discernibles, fuera del detalle de su producción y de una duración que sobre los setenta minutos es excesiva para un estilo tan melódico, lo que puede causar que al apreciarlo sin la debida preparación y entendimiento lo puede convertir en empalagoso, "Vetelgyus" es el mejor disco de la banda hasta la fecha y los coloca en la cima del género y faro de lo que ocurra con el Neo Clasico, pudiendo servir -incluso y en determinadas canciones, como la super interesante Secret Love- de inspiración para bandas como Rhapsody, Rata Blanca o Symphony X, por sólo decir algunos nombres.

9/10 Vigésimo séptimo seleccionado para competir como Disco del Año de El Lado Oscuro - Metal Crítica.