At The Gates tiene comprado hace mucho su billete a los altares del Melodeath, son quizás incluso sus verdaderos creadores. Desde que en 1994 presentaron el seminal y marcador disco "Slaughter Of The Soul" nadie que medio tantee estos medios puede decir que no los conoce, esa es la vara con la que todo se mide. Una demora de doce años para presentar "At War With Reality" (2014) me pareció que no los afectó, por el contrario, ese disco -a despecho de muchos que me contradicen- es de calidad extraordinaria; ahora con "To Drink From The Night Itself" la banda, un tanto refaccionada, trata de confirmar su lugar... que quizás no hace falta.
Este disco mantiene el sonido de At The Gates casi intacto, pero sufre de cierta caída en el songwriting, todo lo que su anterior me pareció interesante, emocionante y atronador, este parece querer mantener la dirección pero con menos éxito, siendo un trabajo algo difuminado cuando se le considera de forma integral. Canción a canción hay temas que se salvan y hacen el día, como To Drink From The Night Itself, Palace Of Leapers, In Nameless Sleep y The Colours Of The Beast, pero tengo la sensación de que la salida de Bjöler de la banda o algo que no termino de determinar, le ha quitado cierta intensidad.
Ciertamente este es un disco muy enfocado en los riffs, las canciones son diferentes entre sí y hay un esfuerzo importante en lo instrumental y especialmente en lo que vocalmente hace Tomas Lindberg, quien debe tener alguna especie de pacto satánico para mantener semejante nivel año tras año, durante décadas, no me quejo de lo realizado en este apartado. Es quizás en lo que se refiere a la calidad de las canciones, a que en su conjunto no me sentí tan impactado como en el pasado reciente. Esta creo que es una grabación que hace seguimiento a lo realizado en "At War", pero con los temas que les quedaron sin grabar en aquel trabajo, una especie de disco de temas lado b -sin ánimo de insulto-. En todo caso no me equivoqué con aquello de que At The Gates volvería.
"To Drink From The Night Itself" ha creado sensaciones mixtas, en general no creo que haya leído u oído nada que sugiera que es un mal disco, de hecho yo creo que es bastante aceptable. Tiene cierta chispa de agresión y evita facilismos atmosféricos que en el Melodic Death son tan comunes, pero a la vez se le critica, con razón, que a nivel del producción no suena todo lo bien que se podía esperar de él, la realidad es que incluso es pobre en lo técnico y la grabación de algunos temas deja que desear, además de que en lo particular creo que le puede faltar ese toque de emoción oscura que la banda tiene.
No es un mal disco, tampoco es grandioso y me genera algo de decepción que estos suecos no me hayan sorprendido tan gratamente como en su anterior trabajo, no digamos que siempre se espera de ellos que vuelvan a sacudir al mundo del Death, que tan bien ayudaron a definir en los años noventa.
7/10